A simple vista...

A simple vista, no eres una niña ni muy alta ni muy baja. Tampoco tienes ninguna característica que te hiciera sobresalir, a no ser que cuente tus complejos. Eres muy creativa y a menudo olvidas cosas, muchas y ellas que no tienen la mayor importancia. Eres terca, orgullosa, pero sabes mantener la cabeza fría cuando de una relación se trata. Odias muchas cosas y amas muchas otras, pero nunca las mencionas. Eres reservada y te encanta entregar cariño y que te demuestren aquello. Si eso no ocurre, terminas por alejarte. A veces te dicen que sueles complicarte mucho al tomar decisiones, o que tu mente nunca esta en donde debería estar y que dejas pasar muchas cosas. Eres despistada, pero intuitiva cuando quieres serlo. A veces puedes ser infantil, y tienes ciertas debilidades que te hacen flaquear. Tratas de ser fuerte, y a veces lo logras como a veces no. Si un amigo te dice que está mal, te contagias de ello y tratas de pensar en todas las opciones al alcance para ayudar. Odias no estar conectada con tus sentimientos. Cuando te hacen daño pierdes los estribos. Crees en muchas cosas pero sobre todo quieres aprender a creer en ti misma. Después de todo siempre quieres vivir el segundo.